Después de Lucía, que es un torbellino,
aquí tenéis una muestra de alguna de las fotografías que realizamos en la primera parte de la sesión de Álvaro, el hermano pequeño de Lucía. Álvaro se porto muy bien, es un bebe tranquilo y dormilón, con el que pudimos trabajar y hacer todo lo quisimos, la sesión fue ligera y terminamos muy bien de tiempo.
Álvaro, un bebé al que anunciaque es calma y tranquilidad, un niño que no llora, duerme y esta vez aunque no llegue a pillarlo, también sonríe como hizo su hermana en la primera sesión.
Los hijos, cada uno diferente al otro, menos mal, porque asi nuestras vidas son mas divertidas y mas entretenidas, con uno te relajas un ratito, con la otra estas toda la tarde corriendo de aqui para alla, unos reclaman tu atención de una forma y otros hacen que babees cuando los ves diburar, o leer, o simplemente hablarte y contarte sus cositas.
Lo divertido de ser padre es que cada dia es una sorpresa, no hay dos dias iguales, aunque tu quieras tener una vida llena de rutinas y orden, cuando llegan los hijos te hacer ir de un lugar a otro, de una extraescolar a un entrenamiento.
Y aquí andamos todos, encantados con nuestros peques y orgullosos de ellos.