Leyre y las amapolas

Esperamos a que crecieran las cebadas, salimos vestidas de gala, subimos hacia el «Alto Campillo» y que bonito es todo, verdes las cebadas, amarillos los trigos, intenso el cielo que avecinaba tormenta, una brisa que hizo fácil el trabajo sin estorbar demasiado.Y nos pusimos a buscar amapolas pero no las encontramos, o sí.